Las fiestas del 2014 le regalaron a la movida cultural porteña y los vecinos
dos leyes de vital importancia para el fomento y protecciónde las actividades artísticas independientes. En la última sesión legislativa del 11 de diciembre, se aprobaron las nuevas leyes de los
Centros Culturales (
Ver nota) y la
ley marco para la promoción del Teatro Comunitario.
Los diputados dieron luz verde, de forma unánime, a la protección, promoción y difusión del Teatro Comunitario en el ámbito de la CABA, es decir, al teatro realizado por y para vecinos, cuya integración al grupo se mantiene abierta a la comunidad y no persigue finalidad de lucro.
La normativa introduce modificaciones en la Ley No 156 de Proteatro(El Instituto para la Protección y Fomento de la Actividad Teatral No Oficial de la Ciudad de Buenos Aires), y “tiene por objeto la protección, promoción y difusión del Teatro Comunitario en el ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, al tiempo que aborda la disciplina en su especificidad como “teatro realizado por vecinos y para vecinos, cuya integración al grupo se mantiene abierta a la comunidad y no persigue finalidad de lucro”.
De esta manera, se creó en el ámbito del Ministerio de Cultura el Registro de Grupos de Teatro Comunitario, conformado indistintamente por personas físicas o asociaciones civiles sin fines de lucro.
Y se estableció un régimen de subsidios con el objeto de ayudar económicamente a los grupos en lo que refiere a los gastos que demanda la producción y difusión de la práctica teatral, el alquiler y mantenimiento de espacios, honorarios profesionales, así como cualquier otro concepto directamente vinculado con dicha actividad.
También se dispuso que los grupos de teatro estén eximidos del impuesto inmobiliario y tasa retributiva de los servicios de alumbrado, barrido y limpieza -ABL-, mantenimiento y conservación de sumideros, de los inmuebles directamente afectados a la práctica teatral, así como de los derechos de delineación y construcción, exclusivamente cuando se trate de construcciones o ampliaciones directamente destinadas a la actividad teatral.
«El teatro comunitario es una actividad cultural de la comunidad y para la comunidad, una práctica que genera transformación social. Parte de la base de que toda persona es esencialmente creativa y que sólo es cuestión de encontrar el marco adecuado para desarrollar sus capacidades. Trabaja desde la inclusión y la integración. Allí todos tienen un lugar, no importa la edad o la procedencia», sostiene el proyecto.
El proyecto inicial surgió desde la misma
Red de Teatro Comunitario, integrada por 11 grupos (50 a nivel nacional), cuando le acercaron una propuesta a la diputada
Gabriela Alegre, del FPV, que daba cuenta de las dificultades que atravesaban los grupos para sostener y hacer crecer esta práctica de arte y transformación social.
Dos años después, debates y modificaciones de por medio, la ley consiguió su aprobación en la cámara de diputados porteña. A partir de ahora, el Teatro comunitario contará con un presupuesto específico como integrantes de Proteatro.
El Teatro comunitario en la ciudad nació en 1983 con el Grupo Catalinas Sur. Tuvo su segundo exponente a partir de 1996 con el surgimiento el Circuito Cultural Barracas, hasta lograr su despegue y evolución.
Un logro para los vecinos que aman este formato de expresión artística.
No obstante, para que los vecinos esten alertas: en las últimas horas se conocieron las clausuras de algunos centros culturales, entre ellos el famoso «Konex». Recordemos que las leyes aprobadas no están en vigencia dado que deben ser promulgadas, proceso que seguramente se retome cuando vuelvan las actividades legislativas oficiales y ordinarias.