El viernes 30 el barrio porteño de Mataderos fue escenario de dos eventos de reconocimiento, a su historia y personajes ilustres.
En el cruce de la Avenida Emilio Castro (al 7603) y Saladillo, el Vicepresidente 1° de la Legislatura, Cristian Ritondo, encabezó la colocación de una placa en homenaje al doctor Samuel Bender, en el lugar donde funcionó su consultorio.
«Samuel Bender eligió nuestro barrio para vivir y ejercer su profesión durante la mayor parte de su vida y nosotros vamos a estar siempre agradecidos por su aporte a la comunidad», afirmó el legislador, oriundo de Mataderos.
Ritondo afirmó «hoy rendimos homenaje a un profesional que supo practicar los valores de la honestidad, solidaridad y la excelencia profesional como fue el doctor Samuel Bender. Qué mejor lugar que reconocerlo en este lugar donde durante más de 50 años funcionó su consultorio».
En tanto, Daniel Bender, hijo del homenajeado, señaló «mi padre fue un ser humano y un médico increíble, que siempre expresó un enorme aprecio por el barrio y su gente. Gracias por este reconocimiento que mantendrá viva su memoria».
El doctor Samuel Bender nació el 23 de enero de 1923, en el barrio de Villa Crespo. Se desempeñó en el Hospital Salaverry en el servicio de Ginecología y Obstetricia y en el Servicio de Obstetricia del Hospital Santojanni.
Fue autor de numerosos trabajos de investigación de su especialidad y obtuvo diversas distinciones por los mismos.
Se mudó al barrio de Mataderos en el año 1954 en Ia vivienda situada en Avenida Emilio Castro 7603, esquina Saladillo donde también instaló su consultorio y donde hoy se colocó la placa, a solo dos cuadras de la General Paz, en el límite con Liniers.
Allí vivió junto a su familia hasta el año 1961, para luego moverse al barrio de Caballito. Sin embargo continuó ejerciendo su profesión en Mataderos durante 46 años hasta su fallecimiento en el año 2000, a los 77 años.
En otro evento, y también por iniciativa de Ritondo y del diputado Roberto Quattromano, el bar “9 de julio” fue declarado de Interés Cultural de la Ciudad. El espacio en cuestión se encuentra ubicado en la Avenida Larrazabal 1276 y abrió sus puertas en 1949.
Fue el lugar de reunión de Alberto Castillo, Floreal Ruiz, el escultor Orio Dall Porto y demás personalidades de la cultura del barrio de Mataderos.
«Por este bar han pasado innumerable cantidad de artistas, cantores de tango y distinguidos referentes de la cultura de nuestra Ciudad que han dejado su huella para siempre”, afirmó Ritondo .
El propietario del bar, Miguel Sciaraffia, señaló “es un sueño este reconocimiento por lo que hemos luchado por mantener este bar, que estuvo a punto de perderse. Pero hoy esta más vivo que nunca para seguir siendo un lugar que resalte lo verdaderamente nuestro durante muchos años más. Lugares como estos tienen que perdurar por siempre”.