Homenaje a 131 años del nacimiento de Alicia Moreau de Justo

Con un acto, charla y debate, la Legislatura porteña rindió homenaje a la fallecida dirigente feminista y socialista Alicia Moreau de Justo el martes 11 de Octubre, a 131 años de su nacimiento.

El acto fue organizado por el diputado socialista Adrián Camps (PSA) que fue uno de los oradores junto a Elena Tchalidy, ingeniera, feminista y presidenta de la Fundación Alicia Moreau, y María Magdalena Macaggi, médica y dirigente socialista.
Bajo el título «Una luchadora contra los molinos de viento», el legislador  Adrián Camps homenajeó a la gran militante socialista por los derechos humanos, de la mujer y de los trabajadores.
Estuvieron presentes, además, el dirigente socialista Héctor Polino; el Secretario Gral. del Partido Socialista Auténtico, Mario Mazzitelli; y el Comunero de la Comuna 5 por el PSA, Raúl Artelino. El cierre del evento estuvo a cargo de la cantante y actriz Marikena Monti.
«Alicia ha sido una víctima del machismo y de la intolerancia hacia la mujer, porque ella, siendo tan brillante, porque hay que serlo para abrirse paso en una sociedad donde están cerrado todos los caminos, nunca fue electa para una función pública. En nuestro país, las mujeres votan por primera vez en 1953; en ese momento Alicia Moreau de Justo tenía 68 años, es decir, que la mayor parte de su vida ni siquiera pudo votar, mucho menos ser candidata. Una de las grandes injusticias de la política argentina«, expresó el legislador socialista Adrián Camps.
«Los 100 años de vida de Alicia, tuvieron momentos de protagonismo y de lucha y otros de silencio y ostracismo. Ella era como un ave fénix que renacía fortificada después de cada momento de ostracismo político. Y uno de esos retornos al ámbito público lo tuvo a los 90 años, con un enorme protagonismo entre los años 1976 y 1983, que no queremos recordar pero tampoco debemos olvidar, porque ella se definió por la defensa inclaudicable por los derechos humanos», destacó Tchalidy.
Por su parte, Magdalena Macaggi, médica y socialista, quien conoció a Alicia Moreau, hizo un recorrido por la vida de esta gran luchadora, destacando su militancia en el ámbito del pacifismo: «Fue pionera en exigir la eliminación del servicio militar obligatorio».
Recientemente, la Legislatura votó una ley que impuso el nombre Alicia Moreau de Justo al salón de usos múltiples del edificio anexo de calle Hipólito Yrigoyen 642.
Alicia Moreau decía que las mujeres no necesitaban discursos sino acciones y por eso dedicó más de 80 años de su vida a luchar por los derechos de los trabajadores y las trabajadoras, de las mujeres para que pudieran estudiar, trabajar dignamente y participar en las decisiones políticas del país. Mujeres como ella, abrieron el camino.
Una historia de lucha
 
Alicia Moreau nació el 11 de octubre de 1885, en Londres, de padres franceses. En 1890, su familia inmigró en la Argentina y se asentó en el barrio Floresta de Buenos Aires, ciudad en la que murió hace exactamente tres décadas, cuando tenía 101 años de edad.
En 1914 se recibió de médica en la UBA e hizo su residencia en el Hospital de Clínicas.  Paralelamente, escribía notas periodísticas sobre feminismo, educación y política en la Revista Socialista Internacional, dirigida por Enrique del Valle Iberlucea.
Apoyó la “huelga de los inquilinos” de 1907 y la “marcha de las escobas”, en defensa de las amas de casa. En 1910 participó del Primer Congreso Femenino Internacional en nuestro país, que reclamaba el voto de las mujeres, entre otras reivindicaciones de género.
Pacifista que se opuso a la Primera Guerra Mundial,  Alicia Moreau fue designada en 1919 por las organizaciones feministas argentinas como delegada al Congreso Internacional de Obreras que se realizó en Washington. Participó también como delegada argentina al Congreso Internacional de Médicas. Fue cofundadora de la Unión Feminista Nacional.
En 1921 se afilió al Partido Socialista, donde militaría hasta su fallecimiento. Al año siguiente, se casó con el histórico líder y fundador de ese partido, Juan Bautista Justo, con quien tuvo tres hijos. Juntos fundaron en 1927 la Casa del Pueblo, una de las bibliotecas con mayor cantidad de volúmenes en el país. Justo falleció en 1928.
Alicia siguió militando y aportando proyectos e iniciativas progresistas a la vida del país.  En 1975, a los 90 años, participó de la fundación de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), junto a Raúl Alfonsín, Adolfo Pérez Esquivel , Alfredo Bravo y Graciela Fernández Meijide, entre otros.
Con el retorno a la democracia, el Congreso de la Nación la proclamó Mujer del Año en 1984 y la Universidad de Buenos Aires le entregó un premio como Médica del Siglo.

Autor entrada: Diego Fernandez

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