Esta reconocida arteria de la Ciudad de Buenos Aires será peatonal en los dos carriles izquierdos entre la avenida Callao y la calle Libertad, todos los días de 19:30 a 02:00 horas. También habrá dos carriles exclusivos sobre la acera derecha para servicios de transporte público, entre las calles Junín y Libertad.
Esto implica que «queda prohibido el estacionamiento general de vehículos junto al cordón de la acera izquierda de la Av. Corrientes, en el tramo comprendido entre la calle Junín y Libertad, todos los días las veinticuatro horas (24 horas), sin excepción».
La norma prevé que se «podrá extender o disminuir el régimen horario en ocasión de feriados, días no laborables, asuetos administrativos, festividades religiosas, festivales conmemorativos o cualquier otro evento«, de acuerdo a la decisión que tome el GCBA a través de la autoridad de aplicación, la Secretaría de Transporte.
Quien si, quien no
Según el texto final del documento aprobado, «quedará prohibida la circulación general de vehículos como también el estacionamiento y/o detención de los mismos«. Los vehículos cuyo lugar de guarda se encuentre afectado al régimen deberán tramitar un permiso.
La flamante normativa establece también el Régimen de Carriles Exclusivos para el autotransporte público de pasajeros, todos los días durante las veinticuatro horas sin excepción, en los dos carriles del lado derecho en el tramo comprendido entre las calles Junín y Libertad.
Sólo podrán circular, además de colectivos, taxis, ambulancias, los vehículos policiales, de fuerzas de seguridad y bomberos, siempre que se encuentren en situación de emergencia.
Las excepciones también incluyen a vehículos particulares que transporten personas con necesidades especiales, vehículos que deban acceder a cocheras privadas, garajes comerciales o playas de estacionamiento, los de empresas de servicios públicos debidamente identificables, los encargados de la recolección de residuos, vehículos de unidades de auxilio mecánico de automotores, distribuidores de diarios, blindados y compensación de fondos bancarios, para transporte postal o valores bancarios.
Y los de los residentes de inmuebles así como de quienes sean propietarios o locatarios de cocheras, con permiso de circulación, de los huéspedes de hoteles y «todo vehículo que, por circunstancias no previstas en la ley, deba tramitar un permiso para circular con carácter de imprescindible necesidad por el carril exclusivo«.
La votación resultó afirmativa con 36 votos positivos y 21 abstenciones de los bloques Unidad Porteña, Suma+, Bloque Peronista, Autodeterminación y Libertad, PTS Frente de Izquierda, FIT y Mejor Ciudad.
Los tiempos de obra
En una primera etapa se contempla realizar la obra del ensanche de aceras que permita la incorporación de espacios con mobiliario colocado especialmente para facilitar el disfrute de la zona y la reconstrucción de las ochavas.
Avenida Córdoba entre la calle 25 de Mayo y avenida Medrano
También mediante una norma aprobada el pasado jueves por unanimidad se estableció el Régimen de Carriles Exclusivos para el autotransporte público de pasajeros todos los días las veinticuatro horas sin excepción, en los dos carriles inmediatos a la acera derecha de la avenida Córdoba, en el tramo comprendido entre la calle 25 de Mayo y avenida Medrano.
Como sucede en estos casos, la norma incluye a las ambulancias, los vehículos policiales, de fuerzas de seguridad y bomberos, siempre que se encuentren en situación de emergencia». Todos aquellos no mencionados, no deben circular por esos carriles.
Los propietarios o locatarios de cocheras deben contar con el permiso tramitado.
Ambas propuestas, las de avenida Corrientes y Córdoba, forman parte de un conjunto de acciones que se encuadran en las previsiones del Plan Urbano Ambiental de la Ciudad de Buenos Aires (PUA), el cual prevé en materia de transporte y movilidad la racionalización del transporte público automotor con función de complementación de los modos guiados, por medio de la ampliación de la red de carriles exclusivos para ómnibus y taxis ocupados y la limitación del estacionamiento vehicular en arterias de tránsito intenso, fundamentalmente en aquellas donde circula el transporte automotor.